sábado, 16 de junio de 2007

la hora 36 y las demás

a veces quisiera que el día tuviera 36 horas. en primer lugar, para poder terminar ese montón de chamba que se acumula peligrosamente sobre mi escritorio y que ahora que trabajo free as a bird y soy mi propia jefa no tengo a quien delegar... pero en fin, es el precio de la libertad.

quisiera más horas sobre todo para dedicarlas a esos asuntos importantes a los que no siempre puedo darles tiempo, por ejemplo:

-llamar a los amigos con los que hace tiempo no hablo. religiosamente, una vez a la semana agarro la agenda y marco del número de alguien a quien hace lunas no veo, pero creo que no es suficiente.

-contestar con mayor tranquilidad los correos electrónicos que llegan a mi buzón.

-ver buena parte de la cantidad de pelis que he comprado con gran ilusión y hasta ahora no he podido ver.

-dormir todo un día, pero de verdad. ¡no hay como marmotear!

-dar una caminata sin rumbo ni apuro y ver hasta dónde llego.

-rippear todos mis cd (y algunos que me han prestado) y convertirlos en mp3.

-ver
seguidos los dvd de todas las temporadas de seinfeld.

-leer varios libros que están esperando desde que los compré.

-pasarme horas en internet de madrugada sin sacrificar el sueño.

-hacer ejercicio, ¡sin excusas!

y seguro un montón de cosas más que ahorita no me acuerdo y para las que las 24 horas quedan cortas.

2 comentarios:

Gastón dijo...

Jaja, hola Bego. Y yo vivía tranquilo hasta que descubrí toodo lo que se odría hacer en 36 horas. Y eso que Jac Bauer sólo tiene 24.

Valeria dijo...

Ademàs de todo lo que has mecionado yo incluirìa

Viajar a algùn lado nuevo
Conversar con amigos hasta quedarme sin voz
Ver el mar y las estrellas por horas y pensando sin estres de por medio
Compartir mas tiempo con niños y mucho mas con mi familia
y otros mas que no recuerdo